martes, febrero 20, 2007

Monsters

¿Puede causar tanto daño una uña pintada?
Por más raro que suene este post (y no, no soy gay), siento como si mi otra mano ahora fuera poseída por una esencia emo maligna capaz de estrangularme en las noches o escribir versos deprimentes y llenos de directas indirectas.
A veces siento que soy otra persona, me ha pasado, estoy haciendo mis tareas cotidianas y olvido el pequeño asunto del dedo índice y cuando menos me doy cuenta veo ese color negro característico en la punta de mi dedo y mis pensamientos se detienen y por un momento olvido quien soy y me empiezo a inventar una nueva identidad. Que rápidamente muere cuando caigo en la realidad con solo mirar mi otra mano o verme en el espejo.
¿Será esta una señal? ¿Me estaré volviendo un ser deprimente y lleno de resentimiento que en su afán de hacer notar eso comience a llorar sobre mis problemas, asumir un peinado extravagante, acosar chicas y ponerme piercings en lugares inesperados?
Esto podría ser culpa de aquella extraña mordida que recibí el sábado en la noche, más bien fueron dos, ¿o fueron más?
Siempre es lo mismo cada vez que veo algo distinto en mis manos.


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