Da Dark Knight

Ciudad Gótica, un punto olvidado de dios donde nacen los rascacielos, como una fusión de Nueva York y la parte lúgubre del barrio de Tepito. Un psicótico y calculador criminal con fetiche al maquillaje y una amplia gama de formas de asesinar a cualquier símbolo de autoridad. Un millonario excéntrico que se viste de murciélago en las noches para llenar su falta de fe y un abogado obsesionado con la justicia cuyo único defecto es su exceso de fe.

Todos esos elementos y otros más son parte de las cosas que llenan a “El Caballero de la Noche” con lo necesario para serle considerada la mejor película que se ha hecho de superhéroes sin involucrar temas para niños.
La historia habla de la representación del bien y el mal, contada de distintos puntos de vista conforme sucede la película.
El personaje interpretado por el fallecido Heat Ledger, El Guasón, es personificado magistralmente como un verdadero payaso sangre fría que no parpadea al ejecutar los actos más atroces jamás concebidos en una fiesta de cumpleaños. Representando la anarquía, el caos y la destrucción tanto social como física, su personaje no exige los mismos intereses que un criminal común y corriente, y simplemente va manipulando a todos a su alrededor para llegar a su verdadero propósito, el cual es demostrar que todos poseemos ese lado oscuro similar a él y que puede despertarlo en cualquier persona sin importar lo que represente, concibiendo al villano
Doble Cara, un personaje igual de magistral pero más improvisado que el Guasón.

El film dura tres horas en total, en las cuales puedes partir la película en dos diferentes estilos y tramas, la primera parte concentrada en la historia de justicia y valores morales, y la segunda es la decadencia de esos mismos valores explotando en sí mismos, vemos como los héroes se rebajan al nivel de sus enemigos para poder dominarlos.
Un filme entretenido, con excelentes escenas de acción y una historia digna de ser disfrutada en un comic.